Imagina que te tuviera aquí delante ahora mismo y te preguntara:
“¿Qué es exactamente una landing page?”.
Tú ¿qué me dirías?
Quizá la primera respuesta que te venga a la mente sea algo como:
“Pues qué fácil, Mila. Una página de ventas, ¿no? Ya sabes, donde presentas tu producto o servicio, y explicas sus beneficios…”.
Aiiiiiiish.
Caliente, caliente, pero no. 😉
La realidad es que existen muchos tipos de landing pages diferentes. Y cada una cumple un papel diferente dentro de tu embudo de ventas.
Eso es lo que vengo a explicarte en este post:
Pero casi mejor si empiezo por el principio…
A ver.
Técnicamente, una landing page sería cualquier página a la que llega un usuario después de pulsar en un enlace (de hecho, landing page significa “página de aterrizaje”).
Pero esa definición me parece demasiado genérica.
Por eso te la cambio por esta otra, que es la que solemos utilizar en el mundillo del marketing digital:
Una landing page es una página que está optimizada (tanto a nivel de texto como de diseño) para lograr que el usuario lleve a cabo una acción determinada.
Y esa acción puede ser que:
Además, lo normal es que una landing page esté optimizada para un único objetivo.
Por ejemplo, si escribes una landing para vender uno de tus infoproductos:
Hay excepciones a esta regla, pero lo normal es eso: una landing, un objetivo.
Pues dependerá en gran medida del objetivo.
Pero a grandes rasgos, todas las landing pages suelen estar compuestas por:
Y me podría extender mucho más, pero creo que es mejor que leas este post que publiqué donde explico la estructura ideal de una landing page.
Vale, ahora que te he dado la chapa hemos dejado claro de qué estamos hablando, toca entrar de lleno en materia.
Te voy a explicar los tipos de landing page más utilizados y para qué sirven.
Y empiezo con una que estoy segurísima de que has visto mil veces…
Una squeeze page es un tipo de landing cuyo objetivo es captar leads.
Sabes a cuál me refiero, ¿verdad?
Esa típica página donde introduces tus datos de contacto (normalmente tu email) para:
Por ejemplo, esta es la página de registro de mi newsletter (si aún no te has suscrito, pincha en el enlace para que veas todo lo que te estás perdiendo). 😉
Una buena squeeze page es clave para llenar tu lista de potenciales clientes de calidad.
Acabas de introducir tu email para descargarte un lead magnet y te aparece una página como esta:
Este es un tipo de landing page que se suele llamar “página de ‘solo falta un paso’” o página de confirmación.
Y el objetivo es simple: asegurarte de que esa persona que te acaba de dejar su email completa el proceso de registro.
Por eso en esta página le das instrucciones para que sepa que:
Esta página es sencilla, pero importantísima, porque hasta que no realice el doble opt-in no estará oficialmente suscrito a tu lista ni podrás enviarle emails.
La página de agradecimiento es un tipo de landing donde llega el usuario tras completar una conversión.
Es decir, tras:
Y lo interesante de este tipo de landing es que la puedes utilizar para conseguir que el usuario siga avanzando por tu embudo de ventas.
Te pongo un par de ejemplos.
A un lead que se acaba de suscribir le puedes ofrecer una OTO o One Time Offer: una oferta muy potente y que está disponible por poco tiempo.
Por ejemplo, un pequeño infoproducto que normalmente vendes a 47 €, pero durante 12 horas se lo dejas a 15 €.
Al ser un precio tan económico, es muy posible que decida comprarlo.
Y una vez se ha convertido en tu cliente y ha probado uno de tus productos, será más fácil que vuelva a comprarte en el futuro.
En el caso de una página de agradecimiento postventa, lo que puedes hacer es un upsell (ofrecerle al cliente un producto de un valor superior al que acaba de adquirir).
Por ejemplo, si tienes un SaaS y esa persona:
¿Ves por dónde voy?
La página de ventas es donde ocurre la magia.
Es el espacio de tu web donde le presentas a un potencial cliente tu producto o servicio, para conseguir que lo compre.
Y eso no se logra poniendo una ristra de características y un botón de compra (aunque estoy segura de que eso ya lo sabes sin que yo te lo diga). 😉
En el copy de tu landing page tienes que:
Si quieres ver un ejemplo, tienes este post donde explico cómo redacté la página de ventas de mi hermana Aisa.
Ya sabrás que, de normal, la web de un negocio tiene varios apartados.
Vale.
Pues una one page es una web donde todas esas secciones están “fusionadas” en la misma página.
Eso significa que en una sola URL tienes que condensar la información principal de tu mensaje de ventas:
Normalmente el objetivo principal de una one page es transmitirle al cliente lo que puedes hacer por él. Pero hay excepciones.
Por ejemplo, la web del copywriter Daniel Throssell (que no es estrictamente una one page, pero casi).
En su caso, él ni siquiera tiene CTAs para vender sus formaciones, sino que el único objetivo de su página es lograr que te suscribas a su newsletter (por cierto, ¿te he contado que una vez me nombró en ella? 😀 ).
Una one page es una opción interesante cuando:
Y ya solo nos queda una más por ver…
Supongamos que tienes un montón de productos o servicios diferentes, cada uno dirigido a un perfil de público con unas necesidades diferentes.
En estos casos, es muy típico hacer una página de “Empieza por aquí”.
Un tipo de landing page que sirve para:
Un ejemplo lo tienes en la página de Sinjania, una escuela online para escritores.
Fíjate cómo en la parte de abajo de su landing te recomiendan unos cursos o a otros según la fase en la que te encuentras (si eres un principiante, si ya tienes una novela y quieres publicarla o promocionarla, etc.).
Me he dejado algunas fuera de esta lista, pero creo que con esto ya te haces una idea de lo amplio que es el concepto de “landing page”.
Lo importante es que sepas:
Y respecto al segundo punto, las que a mí me parecen más complicadas de escribir son las páginas de venta.
Por eso creé Landing Attack.
Un curso en el que explico todo lo que necesitas saber para escribir una página de ventas que convierta.
Entrando en el enlace tienes toda la información sobre el curso.
¿Te veo dentro? 😉